Gobierno ordena sellamiento definitivo de mina La Preciosa, en N. Santander

El ministro de Minas y Energía, Carlos Rodado Noriega, dio la orden de que la mina de carbón La Preciosa, en Sardinata, Norte de Santander, fuera cerrada de manera inmediata, debido al infortunado incidente que se presentó en la mañana de este miércoles que cobró la vida de 20 personas que trabajaban en el yacimiento.

La determinación de Rodado fue anunciada por el mismo ministro desde el lugar de los hechos durante su visita a la mina.

Según Caracol Radio, el titular de Minas y Energía aseguró que el socavón sólo se abriría para culminar con el rescate de los cuerpos que aún quedan atrapados y para ventilar los gases que produjeron la explosión, que al parecer, fue causada por monóxido de carbono.

Así mismo, se informó que vendrá un grupo de socorro desde chile, quienes ayudarán con las labores rescate de los cuerpos.

La decisión del ministro también fue basada en el accidente presentado hace cuatro años cuando en la misma mina se presentó un incidente similar que cobró la vida de 31 mineros.

LOS HECHOS

Un total de 20 mineros murieron y otros seis quedaron heridos por la explosión de gas en un yacimiento de carbón de Sardinata, Norte de Santander.

Marisa Fernández, funcionaria de Ingeominas en el departamento de Norte de Santander, dijo que los cuerpos de 15 de los fallecidos permanecen aún dentro del yacimiento.

Los cadáveres de otras cuatro víctimas fueron hallados en la superficie y ya fueron rescatados, mientras que otro minero que había resultado herido falleció cuando era trasladado a un centro hospitalario, indicó Fernández.

Los seis heridos fueron evacuados en helicópteros a hospitales cercanos y de la ciudad de Cúcuta, anotó la funcionaria de Ingeominas.

La explosión en la mina La Preciosa, situada en San Roque, Norte de Santander, fue provocada al parecer por una acumulación de nonóxido de carbono.

Hace cuatro años la misma mina sufrió un accidente similar que dejó una treintena de muertos.

La peor tragedia minera de los últimos años en el país ocurrió el pasado junio en un yacimiento de carbón de Amagá, en Antioquia, donde una explosión sepultó en un túnel a más de 160 trabajadores, de los que 90 lograron salir y 73 murieron.