Asumió como nuevo director de la Asociación del Menor Rudesindo Soto, Julio Cesar Silva Rincón; el nombramiento hecho por el gobernador William Villamizar Laguado, se hace de manera transitoria a partir del primero de febrero, mientras se toma una decisión por parte del Consejo Directivo de la Asociación para lo que resta de la presente administración.
Silva Rincón, venía desempeñándose como Secretario Privado del Gobernador, en calidad de encargado, al igual que Secretario de Planeación en varias oportunidades. Después de dos años vuelve al Rudesindo Soto.
Es Tecnólogo Agropecuario y Administrador de Empresas de la Universidad Francisco de Paula Santander y Especialista en Finanzas Públicas de la ESAP, labora en la Gobernación, hace veintiún años en carrera administrativa.
Entre sus metas está, continuar con el proceso de reeducar a los adolescentes infractores de ambos sexos de la ley penal colombiana a través de la atención integral, posibilitando la elaboración de su propio proyecto de vida y la adecuada reinserción social.
Llega, asimismo con el compromiso de realizar las gestiones pertinentes para superar la crisis financiera por la que atraviesa la institución que a 31 de enero del 2011, asciende a $ 310 millones de pesos.
Desde su llegada el director, requerirá la colaboración de los empleados de la Institución, para superar la crisis financiera y organizacional, ante una eventual liquidación, situación que pondría en riesgo la atención de los menores infractores.
Silva Rincón, venía desempeñándose como Secretario Privado del Gobernador, en calidad de encargado, al igual que Secretario de Planeación en varias oportunidades. Después de dos años vuelve al Rudesindo Soto.
Es Tecnólogo Agropecuario y Administrador de Empresas de la Universidad Francisco de Paula Santander y Especialista en Finanzas Públicas de la ESAP, labora en la Gobernación, hace veintiún años en carrera administrativa.
Entre sus metas está, continuar con el proceso de reeducar a los adolescentes infractores de ambos sexos de la ley penal colombiana a través de la atención integral, posibilitando la elaboración de su propio proyecto de vida y la adecuada reinserción social.
Llega, asimismo con el compromiso de realizar las gestiones pertinentes para superar la crisis financiera por la que atraviesa la institución que a 31 de enero del 2011, asciende a $ 310 millones de pesos.
Desde su llegada el director, requerirá la colaboración de los empleados de la Institución, para superar la crisis financiera y organizacional, ante una eventual liquidación, situación que pondría en riesgo la atención de los menores infractores.
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