El presidente Juan Manuel Santos vistará hoy la mina La Preciosa, en Sardinata, Norte de Santander, para conocer las causas de la explosión que acabó con la vida de 21 mineros, cuyos cuerpos fueron rescatados este jueves después de 31 horas de búsqueda.
Santos adelantó el regreso de su gira por Europa, y desde Francia llegará directamente a Norte de Santander.
El grupo de fiscalización de Ingeominas comenzó las investigaciones. La primera teoría es que se trate de una acumulación de gases, sin embargo, "ahora tenemos que juntar todas las evidencias técnicas del caso con un equipo de expertos", contó Marisa Fernández, coordinadora del Grupo de Trabajo Regional Cúcuta.
La funcionaria de INGEOMINAS, entidad encargada de hacer la fiscalización de las minas en el país (seis mil legales), aclaró que en la última visita que su equipo realizó a La Preciosa el 9 de septiembre de 2010, la mina "estaba en condiciones de trabajo y cumplía con las normas de seguridad".
Sin embargo, ya tenía antecedentes de tragedias. Cuatro años atrás, el 3 de febrero de 2007, se presentó una emergencia similar que dejó 32 mineros muertos. En ese entonces, según INGEOMIMAS, la explosión se presentó por la acumulación de metano y las malas prácticas de los mineros que en ella trabajaban.
La mina se cerró durante cuatro meses y reabierta luego de que el gerente, Gabriel Tamayo, presentara un plan de recuperación en el cual garantizaba la seguridad dentro de la mina.
Con la muerte de los 21 mineros el miércoles de esta semana, se conoció que la ARP Positiva, empresa a la que estaban afiliadas los trabajadores, reconocerá a los familiares de las víctimas las prestaciones, que podrían ascender a 4.000 millones de pesos.
En un comunicado, Positiva informó que "la semana entrante estará presente en la zona otro grupos asesor de la ARP que se encargará de acompañar a las familias en los trámites correspondientes para obtener las pensiones y demás prestaciones económicas a que haya lugar".
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