Una persona muerta, tres desaparecidas y 700 familias damnificadas en ocho municipios dejan las lluvias en Norte de Santander, en lo que ha transcurrido de septiembre.
Pero la situación más delicada se registra en la vía Cúcuta-Ocaña, por donde no hay paso, debido a que 50 derrumbes impiden el tránsito de vehículos y peatones.
En alerta amarilla se encuentran los organismos de socorro, ante el incremento del caudal de los ríos, el pésimo estado de las vías y los fuertes derrumbes que se registran.
Mientras tanto, un desparecido, tres viviendas destruidas y alrededor de 19 casas afectadas deja como resultado la presencia de fuertes lluvias en Cucutilla, que ocasionaron el desbordamiento del río de esta localidad que se encuentra incomunicada con el resto del departamento como producto de los deslizamientos en la carretera.
Luis Alfonso Tarazona, director de Comité Regional de Atención y Prevención de Desastres (Crepad), dijo que también se han presentado situaciones de emergencia en San Cayetano y El Zulia, producto de la ola invernal registrada en los últimos días.
La pérdida de cultivos y la inundación de viviendas son los daños más visibles ocasionados por las lluvias.
Tarazona Llerena señaló que se hará una visita a los lugares de la emergencia para analizar la situación y determinar las acciones inmediatas que se adelantarán; precisó, que se tiene un censo consolidado, el cual será presentado a la Dirección Nacional de Atención y Prevención de Desastres para posteriormente hacer la solicitud de ayuda.
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