El comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, Coronel Jorge Iván Flórez Cárdenas, señaló que unidades de la Región No. 5 de Antinarcóticos, llegaron hasta el corregimiento de Palmarito del Municipio de Puerto Santander, donde luego de recorrer varios kilómetros internados en la zona montañosa descubrieron el complejo cocainero cuyo costo superaría los setecientos millones de pesos.
“Los uniformados luego de realizar trabajos investigativos, establecieron el lugar donde funcionaría el centro de producción, por lo cual desplegaron la operación de interdicción terrestre que permitió llegar hasta la zona fronteriza, donde organizados estratégicamente dentro de la zona selvática se hallaron siete construcciones en madera y techos de plásticos”, argumentó el oficial.
En el complejo cocainero fue hallado un completo sistema de procesamiento, secado y empaque del narcótico, del cual había treinta kilogramos listos para sacar al mercado internacional. También fue hallada una gran cantidad de precursores químicos sólidos y líquidos, los cuales son utilizados en el procesamiento del clorhidrato de cocaína, entre ellos Acido Clorhídrico, Cetona, ACPM, Soda Caústica, Cloruro de Potasio, Carbón Activado, entre otros.
Algunos de los elementos descubiertos en el lugar y que son utilizados para la producción y cristalización de la cocaína, fueron un gusano de diez bocas, un marciano, tres tolvas de decantación, hornos de secado, prensas hidráulicas, centrífugas, un compresor, canecas para la mezcla y el almacenamiento de los insumos químicos y el narcótico, entre otros artículos.
El Coronel Flórez Cárdenas, señaló que los narcotraficantes habían acondicionado un sistema eléctrico de alta potencia que podría suministrar energía a una población mediana, dentro del cual se encontraba una planta de energía de alto voltaje y un transformador, elementos que les permitía procesar sin problemas el alcaloide.
“De las sietes construcciones cinco estaban organizadas cuidadosamente para desarrollar en cada una de ellas actividades específicas de procesamiento, secado, cristalización y empaque de la cocaína. Entre tanto las dos restantes servían como alojamiento a por lo menos 25 personas que trabajarían en el lugar, una de las cuales era para las mujeres y la otra para hombres”, concluyó el Comandante de la Mecuc.
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