Protestas en puentes fronterizos con Venezuela

Unos 250 manifestantes colombianos bloquearon el paso por los puentes fronterizos entre Colombia y Venezuela en protesta por las operaciones de la Guardia Nacional venezolana para frenar el contrabando de alimentos y combustibles.

La protesta comenzó temprano en los puentes Francisco de Paula Santander y el internacional Simón Bolívar, que unen al estado venezolano de Táchira, al extremo suroeste de Caracas, con el departamento colombiano de Santander, reportó la estatal Venezolana de Televisión.

La televisora, sin dar detalles, agregó que se registraron algunas fricciones entre agentes de la Guardia Nacional y los manifestantes, la mayoría de ellos trabajadores colombianos, conocidos como "caleteros", que se dedican a pasar a Colombia sobre sus hombros mercancías desde el lado venezolano de la frontera.

La protesta es respuesta a las "medidas más estrictas" que los últimos cinco días han tomado los militares venezolanos para "reducir el contrabando de extracción tanto de alimentos como de combustibles hacia Colombia", se informó.

Los manifestantes han incendiado llantas y tirado piedras contra los miembros de la Guardia Nacional, quienes contestaron con bombas lacrimógenas.

Los manifestantes, citados por medios locales venezolanos, sostienen que las medidas adoptadas por los militares venezolanos les ocasiona grandes perdidas al arrebatarle su tradicional medio de sustento.

Voceros de la Guardia Nacional, en Táchira, no estuvieron disponibles para un comentario.

El gobierno del presidente Hugo Chávez ha restringido drásticamente el paso de alimentos y otros productos hacia Colombia y suspendió la entrega de combustible a ese país como parte de las medidas adoptadas tras declarar "congeladas" de relaciones.

Chávez decidió a finales de julio distanciarse del gobierno del presidente colombiano Alvaro Uribe en protesta por el acuerdo que está negociando Colombia con Estados Unidos para permitir la presencia de tropas estadounidenses en al menos siete bases colombianas, lo que Caracas considera una amenaza a su seguridad.