Por culpa de la crisis, este año ha sido de transición tanto para las empresas como para los empleados, con pocas alzas en los sueldos.
Debido a la caída general del Índice de Precios al Consumidor, IPC, durante este año, el ajuste de los sueldos para los trabajadores que ganan más de un salario mínimo, dejó de estar presionado por la inflación.
En general, los distintos indicadores de empleo muestran un mercado laboral menos estrecho, lo que, unido a un entorno donde las expectativas de inflación están a la baja, ha permitido reducir las presiones alcistas sobre los ajustes salariales aplicados en lo corrido del año.
Si bien el salario mínimo legal para 2009 se ajustó 7,7 por ciento, acorde con la inflación observada de 2008 (que fue relativamente alta), ese incremento parece no haber influido sobre un porcentaje importante de los acuerdos salariales del país.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario